Preparamos 3 sartenes grandes:

Primera sartén: hacemos una fritura con los ajos picaditos, las cebollas, los pimientos verde y rojo, el laurel y el tomillo. Añadimos un poquito de sal y dejamos que se vaya pochando a fuego lento.

Mientras esto se hace vamos a ir adelantando lo demás.

Segunda sartén: ponemos un poquito de aceite y salteamos los garbanzos a fuego vivo. Sacamos y reservamos. En esa misma sartén añadimos un poquitín de aceite (ver si hace falta o no) y salteamos la carne cortada en pedazos pequeños. Reservamos.

Tercera sartén: Ponemos aceite abundante y freímos las papas en cuadraditos. Reservamos

En este momento la fritura estará en su punto, le añadimos el pimentón, rehogamos un minutito, incorporamos el chorrito de vino blanco y dejamos un par de minutos que evapore el alcohol. Añadimos los garbanzos y la carne que habíamos reservado, le damos unas vueltitas y en este momento añadimos el clavo machacado, la canela molida y las papas fritas. Removemos y dejamos un par de minutos para que se mezclen bien todos los sabores.

Emplatamos y espolvoreamos con el perejil picadito. Como sugerencia de presentación si acompañamos esta ropa vieja con un huevo de granja frito queda deliciosa.

Nota: La Ropa Vieja canaria es un plato que si bien originariamente fue un plato de aprovechamiento de las sobras del puchero, como en todos lados, actualmente tiene entidad propia como plato por tanto si queremos hacer esta receta partiendo de cero lo único que debemos hacer es en una olla rápida poner a cocer la carne con los garbanzos y algunas verduras de condimentación (cebolla, puerro, zanahoria, apio, un par de dientes de ajo) y tendremos carne y garbanzos para nuestra Ropa Vieja además de un caldo magnífico para una sopa.